Lucía Huel Costabel nos relata como fue su colaboración en la obra “En nuestras propias palabras”

¿Quién es Lucía Huel Costabel y cómo nace tu participación en la obra: “En nuestras propias palabras”?

Creo que decir “quien soy” es una tarea muy complicada, pero puedo intentarlo diciendo que soy una joven de 23 años, vivo en la provincia de Córdoba, me apasiona mucho la literatura y el psicoanálisis. Actualmente estoy terminando la carrera de Psicología y empezando a insertarme en instituciones de Salud Mental.

Mi participación en el libro nace luego de la invitación de Monica Di Nubila, a quien conozco por su amistad con miembros de mi familia. Una tarde, vía llamada telefónica, me comentó sobre el proyecto y sus ganas de incluir a autoras de diversas edades y nacionalidades. Allí me propuso que me pensara en relación al feminismo en la Argentina y que escribiera sobre cómo estaba viviendo la movilización política/ social en torno a la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo, y todo aquello que considerase pertinente agregar.

Tu aportación al libro se titula: “Cuando polemicé con mi ideología”, y es de las más especiales y personales del libro. Para quién no la haya leído aún, ¿en qué se basa?

Para quien no la haya leído aún, mi aporte en el libro se basa, en primer lugar, en una opinión producto a mi experiencia de vida. Es un relato de uno de los aprendizajes más importantes que tuve hasta ahora, el ser mujer conlleva que nuestro cuerpo y nuestro deseo, esté en la boca y el debate de esferas políticas, religiosas con pseudo discursos moralistas. Sin embargo, más allá del largo camino que tuvimos que recorrer, es importante que se perpetúe el activismo de diversos sectores sociales y disidencias del país, para no perder la cuota de esperanza.

Debido a tu educación en un colegio católico “de señoritas”, te has visto privada de mucha información por una educación muy sesgada en temas como educación sexual. ¿Qué consecuencias ha tenido esto en tu vida?

La principal consecuencia fue la desinformación, el poco conocimiento y lectura crítica hacia la realidad que me rodeaba, así también, al vivir durante muchos años en un lugar donde las movilizaciones no eran habituales, entendía a la participación social como algo lejano a mi realidad.

¿Cómo y en qué momento llegó a tu vida el feminismo?

Creo que el feminismo, en cierto sentido, siempre estuvo en mi vida, en relación a cierta mirada crítica otorgada por mis padres, y a partir de incomodarme y preguntarme por lo que veía en las noticias, particularmente femicidios de chicas adolescentes que en ese entonces tenían mi edad. Empero, a partir de mi ingreso en la facultad y luego de adquirir nuevas lecturas, nuevos debates, recorrer nuevos escenarios, pude interiorizarme con la lucha, la cual considero, es algo que forma parte de la cotidianidad, no solamente recordarlo los 8 de Marzo en el dia de la Mujer, la postura y lectura crítica que aporta el feminismo nos acompaña y nos otorga herramientas para defendernos día a día.

¿Qué opinas de Argentina y de lo mucho que costó legalizar un aborto seguro y libre para todas?

Considero que la legalización del aborto fue un proceso trabajoso por varios motivos, tanto politicos – economicos como ideológicos. El Estado naturalizó y habilitó las prácticas clandestinas de interrupción del embarazo por muchísimos años, avalado por la represión penal que existía en aquél entonces, e inhibido a impulsar políticas públicas que aseguren la educación sexual integral y el acceso a anticonceptivos gratuitos. Asimismo, la censura moral y religiosa, que aún se sigue escuchando, que condenaba (y aun condena) a la mujer deseante de “otra cosa”, otra cosa por fuera de gestar un hijo, restando importancia al hecho que abortar en condiciones clandestinas les podía costar la vida. Por último, la aprobación de la ley iba en contra del negocio realizado por clínicas privadas, quienes adquirían grandes sumas de dinero por esta práctica.

Para terminar, ¿cuáles crees que son los próximos pasos a dar en Argentina para avanzar en este tema tan vital?

Creo que los próximos pasos a dar en Argentina tienen que ver con la educación en derechos y educación sexual integral, para toda la extensión del país, priorizando aquellos sectores vulnerables, donde la violacion de los derechos de las mujeres son violados, y tal situación naturalizada. Asimismo, educar en el respeto hacia el deseo y la subjetividad del otro, en tanto sujeto portador de una voz que debe ser escuchada más allá de las posibles diferencias ideológicas que puedan existir.