Ibon Abad, “El escritor tatuado”, nos presenta su primer libro «El Akelarre de San Sebastián»
Para quién no te conozca, ¿quién es Ibon Abad?
Ibon Abad es un tío de 31 años que ha hecho un poco de todo; he sido camarero, levantador de piedras, socorrista, portero de discoteca, conductor de autobuses y, ahora, intento de escritor. Me he flipado un poco y me he puesto el sobrenombre de “el escritor tatuado”.
¿Cómo nace tu vena escritora?
Desde muy pequeño he sido un lector voraz, engullía novelas y las releía hasta la saciedad, y siempre soñaba con ser escritor, aunque tenía demasiado respeto y reverencia a la profesión como para atreverme a intentarlo. Empecé a escribir con 23-24 años, pero siempre borraba lo que escribía, no se lo mostraba a nadie. Y hace cosa de un año, un poco cabreado con el mundo y la realidad, me puse a escribir y a publicar mis escritos como un poseso. Con rabia.
¿Cuántos libros has publicado ya?
“El Akelarre de San Sebastián” es mi primer libro, pero no el último, ni mucho menos. Espero sacar mínimo un libro al año, tengo muchas ganas de dar rienda suelta a la imaginación, mucha hambre de entretener y hacerlo cada vez mejor.
¿Qué es lo que más destacarías de “El Akelarre de San Sebastián”?
A nivel creativo, desde el punto de vista del escritor, destacaría que es un libro que me ha salido solo, a la fuerza, sin planificarlo mucho. No tenía pensado tocar la tecla de la fantasía, pero cuando me ponía frente al ordenador me salía solo, como si mi cerebro tuviese que vomitar esta historia. Me gustaría ser de esos que planifican lo que escriben, porque me parece que tiene mucho más mérito, pero mi forma de escribir es bastante caótica.
En cuanto a la trama, destacaría… bueno, diría que he querido meterle un poco de heavy metal a una ciudad tan de postal como es Donosti. Si buscas brujería, un dragón sobrevolando la ciudad, tribus caníbales acechando en los parques de la ciudad, catacumbas… este akelarre es para ti.
¿Alguna anécdota que puedas contarnos?
Hubo una que casi me mata… hubo un día en el que me pasé cerca de nueve horas escribiendo ininterrumpidamente. Estaba en la fase final, terminando de escribir la última parte del libro y el epílogo, y me puse a escribir como en trance, sin mirar el reloj, hasta que acabase. Fueron un par de capítulos y el epílogo, creo. Pues cuando puse el punto final al texto, dándolo por terminado, el ordenador se quedó sin batería, y cuando lo encendí me di cuenta de que no había guardado en ningún momento todo el trabajo que hice aquel día. No hubo manera de recuperarlo. Tuve que volver a escribir los últimos capítulos y el epílogo, esa misma noche, para que no se me fuese la idea.
¿Qué pretendes provocar en el lector con la lectura de tu obra?
Quiero atraparlo. Que en cuanto ponga el ojo sobre la primera frase ya no se pueda escapar. Abrazarlo como una boa hasta que se lo acabe, y que lo haga a gusto, disfrutándolo.
¿Qué consejo te gustaría darle como escritor a tu yo de hace unos años?
Me diría que no me arrepintiese de intentar ser valiente, aunque hiciese el ridículo. Creo que un cobarde que quiere ser valiente vale más que un cobarde que finge ser valiente.
¿Cuál ha sido tu experiencia con la Editorial Círculo Rojo?
Muy buena, ha sido como si me pusieran una alfombra roja frente a los pies desde el primer día. El trato con las profesionales que me corrigieron, ilustraron y diseñaron la portada y los dibujos, la maquetación, la distribución… no tengo nada más que cosas buenas que decir de la editorial. Me dieron la oportunidad de cumplir un sueño y me lo pusieron muy fácil.
¿Qué autores te han inspirado más a la hora de escribir?
Creo que muchos de ellos, seguro que me dejo alguno sin nombrar. Arturo Pérez-Reverte es sin duda mi número uno, me atrapó con el capitán Alatriste desde muy pequeño y no puedo ser objetivo con él, soy fanático de sus novelas y devoro todos sus libros el primer día que salen a la venta. Isabel Allende y Agatha Christie me marcaron muchísimo cuando era niño, y más adelante Grisham, Mario Puzo, Don Winslow, George R.R. Martin… actualmente me fijo mucho en Juan Gómez Jurado, en la forma de escribir de Daniel Fopiani y Men Marías. Seguro que me dejo muchísimos…
¿Dónde se pueden conseguir tus libros?
Podéis conseguirlos a través de mi web, elescritortatuado.es, donde también subo relatos a menudo y os puedo mantener al tanto de mis andanzas. También podéis adquirir “El Akelarre de San Sebastián” en La Casa del Libro, Fnac, Libros.cc, El Corte Inglés y en todas las librerías de San Sebastián y en Vitoria. Y todavía espero poder expandir el Akelarre un poquito más.
Para terminar, ¿nos recomiendas alguna lectura?
¡Me pasaría el día recomendando y hablando de libros! Intentaré ser breve… “El silencio de los ahogados”, de Daniel Fopiani, “La última paloma”, de Men Marías y la trilogía de Reina Roja de Juan Gómez Jurado; si no la conocéis ya, ¡estáis tardando! Ah, y “El Italiano” y “Sidi”, de Reverte… y ya paro…
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