¿Y si lo que necesitas está en otro mundo…? | Por Teresa Valencia del Rincón
¿Quién no ha sentido alguna vez que le falta algo? Nada de lo que te rodea parece suficiente. Te invade un desánimo sin motivo aparente.
Escribí Iris porque, a veces, lo extraordinario se esconde donde menos lo esperas. Ella también siente ese vacío. Intuye que algo más está sucediendo, aunque nadie más pueda verlo.
Iris existe para quienes creen en la magia, aunque no siempre se vea. Para que, al terminar su lectura, desaparezca tu desasosiego y renazcan la ilusión y la esperanza. Para quienes sienten que este mundo no basta, y alguna vez desearon cerrar los ojos y estar en otro lugar. Después de leer Iris, los abrirán sabiendo que algo ha cambiado.
Iris nació de una vivencia personal. Tirando de ese hilo, y con la ayuda de mi imaginación, fui tejiendo esta historia: la de una chica que se siente extraña en su propio mundo, deseando un cambio, aunque no sepa cuál.
Cuando encuentra la puerta a ese otro mundo mágico que la estaba esperando, su alegría se desvanece por una decisión errónea que pone en peligro todo lo que ha descubierto.
La magia de esta historia es una magia que respira, que está viva y que transforma desde dentro. Es luz y sombra, porque lo que ocurre en ella provoca una transformación profunda y verdadera.
A lo largo del camino, Iris irá adquiriendo conocimiento y viviendo un importante proceso de crecimiento personal.
Es una chica que se atreve a sentir, a dudar, a equivocarse y a tomar decisiones difíciles…
Los personajes que la acompañan no son simplemente aliados o enemigos: forman parte esencial del relato y representan caminos posibles.
Cada uno encarna un aspecto del viaje interior que, en algún momento, todos debemos emprender.
Todos tienen un motivo y una historia que contar.
No abrimos un libro solo para leer, y eso es lo que más me impulsó a escribir Iris. No es una simple aventura fantástica, sino una forma de ver el mundo con otros ojos, capaz de despertar algo en tu interior que surrurre: “Oh, tú también puedes cambiar algo”. Y cuando eso sucede, cuando descubres el poder que llevas en tu interior para transformar las cosas a mejor, entonces ya no eres la misma persona.
Posiblemente, esa sea la razón por la que la fantasía sigue siendo tan poderosa: porque nos enseña a enfrentarnos a nuestros propios miedos e indecisiones. En sus páginas podemos llorar, reír, aprender y, sobre todo, imaginar.
La imaginación es fundamental. Es el primer paso hacia la transformación. Porque cuando alguien se atreve a soñar un mundo distinto, ya ha comenzado a construirlo.
Y cuando crees que eres capaz de algo, estás mucho más cerca de lograrlo.
Iris no es solo una historia de fantasía juvenil.
Quienes se adentren en sus páginas ya no volverán a mirar su mundo del mismo modo.
En su corazón late una magia antigua, poderosa y luminosa, tejida con secretos, pero presente en nuestro día a día.
Los personajes de este libro no son héroes ni heroínas perfectos.
Se atreven a equivocarse, porque también de los errores se aprende.
Son almas como las nuestras, que sienten, dudan y luchan por lo que de verdad importa.
La protagonista tiene que salvar la magia y el bosque encantado. Pero también debe salvarse a sí misma y a su propio mundo.
Y, para lograrlo, primero tendrá que empezar a cambiar por dentro.
Sí, por eso escribí Iris: porque a veces una historia puede ser una semilla.
Y estoy segura de que, tarde o temprano, germinará en quien la lea y sabrá que hay puertas que se abren solo si crees en ellas.
Iris es una de estas puertas.
¿Te atreves a cruzarla?

Teresa Valencia del Rincón
Escritora
Web: https://teresavalenciadelrincon.com/
Facebook: https://www.facebook.com/teresavalenciadelrincon/
Blog “El rincón de Tessa”: https://teresavalenciadelrincon.com/blog/
Comprar «Iris»: https://amzn.to/3HyXlfb
Quiero agradecer sinceramente a «El Escritor.es» por publicar este artículo y brindarme la oportunidad de compartir mis ideas con una comunidad tan apasionada por la literatura. Es un placer formar parte de este espacio y contribuir con mi voz a la conversación literaria. Gracias también a quienes se tomen el tiempo de leerlo. Estaré encantada de conocer vuestras impresiones.