Hablamos con Eduardo Martínez Martín, autor de la obra “Un volar sin alas pero con la imaginación” publicada con la editorial Círculo Rojo
Eduardo, cuéntanos un poco sobre tu experiencia personal y cómo el proceso de escribir se convirtió en una herramienta para enfrentar tus emociones y superar la depresión. ¿Qué te motivó a plasmar tus vivencias en un libro?
Mi experiencia personal ha sido empezar a hacer todo de cero, a buscar y encontrar amigos que fuesen más afines a mí, ya que en el pasado me tenía que poner, por así decirlo, a otro nivel en el que sentía que no era yo y no estaba a gusto con lo que tenía. No digo que eso me pasase con todos, pero si con la mayoría. Para mí era más fácil escribir las cosas que decirlas. Cuando empezó a tener todo sentido en mi mente y a estar yo mejor y con las ideas más claras fue cuando decidí comenzar a escribir lo que tenia dentro. Cuando conseguí más confianza en mí, compartí lo que escribía y al ver que gustaba decidí plasmarlo en un libro para así también poder ayudar a otros, para darles un poco de luz con mí historia
En la sinopsis, mencionas que tu libro es una “aventura” y una “escapatoria” de la oscuridad de la mente. ¿Cómo crees que la escritura y la fantasía pueden ayudar a las personas a enfrentar sus desafíos emocionales y liberarse de los obstáculos que les impiden avanzar?
Bueno pues a mí me desahogaba mucho el escribir lo que se me pasaba por la cabeza antes de tener aventuraque me resultaba difícil hacer, así a la vez que me liberaba de todas esas presiones me enfrentaba al desafío quitándome un gran peso de encima
¿Cuál fue tu proceso de escritura para este libro? ¿Te enfrentaste a desafíos al escribir sobre experiencias personales tan íntimas y cómo los superaste?
Pues lo empecé cuando estaba haciendo un curso de auxiliar administrativo, porque nos mandaron escribir un cuento y la verdad me gusto tanto lo que estaba escribiendo que lo continué en casa, sobre todo al de perder el miedo a compartir lo que sentía con los demás a través de la escritura me libero de bastante presión. Simplemente mostrando lo que escribía sin pensarlo dos veces.
¿Qué esperas que los lectores encuentren en tu libro? ¿Cuál es el mensaje principal que deseas transmitir a aquellos que lo lean?
Un poco de luz y esperanza para que sobre todo vean que siempre existe una alternativa a la que agarrarse para salir hacia adelante. El mensaje sería que es bueno dejarse ayudar de vez en cuando por las personas que tenemos a nuestro alrededor y que con trabajo y constancia se puede con todo.
Has mencionado que recibiste apoyo y orientación de Nerea Rubio, quien fue una figura importante en tu proceso de sanación. ¿Cómo ha influido esta experiencia en tu vida y en tu obra literaria?
Esta figura ha influido en que con su terapia me enseño a que podía volver a ser yo, con ejercicios tales como soltar los nos, en una hoja iba escribiendo todos los nos, los escribía de diferente tamaño pequeños grandes después los rompía. También yo era constante y no me rendí a la mínima adversidad que se me presentaba. En mi obra menciono muchos ejercicios que influyeron mucho en mi recuperación. Ha sido una parte vital en este proceso
Hablemos un poco sobre tu experiencia con la editorial Círculo Rojo. ¿Cómo fue el proceso de publicar tu libro con ellos? ¿Qué tal ha sido trabajar con esta editorial?
Bueno pues ha sido un proceso increíble la verdad. Han cumplido con todo lo prometido, ha sido un acierto publicar con ellos, trabajan muy rápido por ejemplo desde que les mande el borrador hasta que contestaron tardaron menos de una semana, y a raíz de eso siempre estuvimos en contacto para aclararme las dudad que me pudiesen surgir en cada parte del proceso. Estoy realmente feliz de haber contado con un equipo de trabajo tan maravilloso y muy cercano.
“El viaje de la luz” aborda temas sensibles relacionados con el duelo y la superación personal. ¿Qué esperas que los lectores saquen de tu libro y cómo esperas que los inspire en sus propias vidas?
Yo personalmente tuve un momento de lucidez cuando estaba sumergido en esa oscuridad y encerrado en el laberinto. Tuve como yo digo un “chispazo” al que hice caso y fue cuando me acorde de Nerea y en sus enseñanzas para salir adelante. Pero la clave, por decirlo así, fue el reconocer que realmente tenía un problema y que por pedir ayuda no eres menos valiente al revés. Yo creo que eso es lo fundamental. Lo que quiero hacer ver a los demás es que no es malo sacar los sentimientos, lo que se lleva dentro, eso es lo que me ayudo a empezar a ver un poco de luz.
¿Cuál fue la parte más significativa o desafiante de escribir tu primera sinopsis? ¿Cómo definirías la experiencia de plasmar en palabras la esencia de tu obra?
La verdad la parte más significativa fue empezarla. Luego fluyo sola, como cosa de magia, que es realmente lo que es para mí escribir, un proceso en el que dar sentido a todo lo que llevo dentro, es asombroso.
¿Qué consejo le darías a otras personas que han pasado por situaciones difíciles y que están considerando utilizar la escritura como una forma de terapia o expresión personal?
Que no duden en ponerse a ello, porque la escritura es una de las mejores terapias que pueda haber, ya que te permite expresar hasta el más profundo de los sentimientos.
Por último, ¿tienes planes para futuros proyectos literarios? ¿Continuarás explorando temas similares en tu escritura o tienes otras ideas que desees explorar?
Por supuesto me encanta escribir nunca paro, tengo una segunda parte terminada del primer libro y otra tercera por terminar más algún poemario ya que escribo poesía todos los días.
Por el momento seguiré en esta línea de escritura.
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