«Esa persona no es para ti (10 motivos)» | Por Alberto Simón
- Tienes que perseguirla
Si esa persona no muestra el mismo interés, tienes que ser tú siempre el que propone veros, tienes que estar continuamente persiguiéndola, a por otra cosa, te va a tener siempre en un pedestal, esa persona va a sentir como que te está haciendo un favor y acabará dejándote.
2. Te supone un sobreesfuerzo.
¿Te agota intentar llegar a la otra persona?, ¿notas que la cosa no avanza y ya no sabes ni qué hacer?, pues esa persona no es para ti.
3. Tienes que aparentar.
Si tienes que aparentar se otra persona o tienes que dejar de ser tú, esa persona no es para ti, porque no está aceptando ni respetando tu singularidad. Esas apariencias perpetuadas en el tiempo te provocarán una pérdida de sentido, es algo insostenible.
4. No hay respeto mutuo.
Si esa persona no te respeta, fuera, punto.
5. Te corta las alas.
Si no te permite perseguir tus sueños, si no te permite hacer la mayoría de las cosas que quieres hacer (siempre respetando el contrato de pareja), esa persona no es para ti. Jamás serás feliz al lado de esa persona.
6. No te da prioridad.
Primero nos priorizaremos a nosotros mismos, por encima de todo. Pero si, por ejemplo, tu pareja se va todos los días de fiesta hasta las tantas y a ti solo te ve los domingos de 18-20:30, a mi parecer, a esa persona no le importas un carajo y no te conviene.
7. Sus valores son muy diferentes.
Si hay valores muy importantes que chocan (por ejemplo, a uno le gustan los toros y el otro es defensor de los animales), será muy difícil que podáis disfrutar de esa relación sin que haya continuos conflictos.
8. No tenéis nada en común.
Si no hay algo que os une, alguna afición en común, será difícil palpar la complicidad de la pareja. Debería haber algo en común que sume y estructure a la pareja (ir al campo, jugar a los bolos, etc…).
9. Discusiones, discusiones, y más discusiones.
Si os veis sumidos en continuas discusiones que nunca se lleguen a resolver, quizás no merezca la pena seguir juntos.
10. Tienes que medir las palabras.
Si en todo momento te sientes como en una entrevista con el FBI, esa persona no es para ti. Es insostenible vivir bajo tal presión. Debería de existir total libertad de expresión (siempre con una madurez y sensatez de por medio).
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