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Sangue Shi nos presenta su libro de terror, «La tejedora del velo negro»

Sangue Shi nos presenta su libro de terror, «La tejedora del velo negro»

Para quién no te conozca, ¿quién es Sangue Shi?

Estoy graduado en Ciencias Ambientales por la UAM. Además, cursé el Máster en Antropología Física (UAM, UAH y UCM). Actualmente trabajo como Redactor Académico en una empresa.

Soy creador y guionista del universo de ciencia ficción ALFAΩ actualmente estoy en proceso de publicación editorial del primer libro de la saga (AKAME: Parte I, que ya se encuentra disponible en Amazon). También escribo historias de terror y, a veces, poemas. Recopilo y reedito grimorios sobre magia y religión del Camino de la Mano Izquierda y soy multi-instrumentista en un proyecto de metal experimental llamado Dirty Core (ahora disponible en Bandcamp).

Mi interés por la ciencia ficción, el estilo gótico y similares, me llevó a experimentar mis pensamientos en papel hace ya unos cuantos años. Soy apasionado de la música en general, del cine, del cómic, del manga, del anime, de la fantasía, de la ficción y del terror.

Actualmente, me considero simpatizante del Camino de la Mano Izquierda. Apoyo el Feminismo y las reivindicaciones del movimiento LGTB+, en busca de la igualdad de derechos de las personas. En cuanto a la política, soy progresista y defiendo la libertad individual. No simpatizo con ningún sistema económico, y tampoco con el Estado y las Fuerzas Armadas.

¿Cómo nace tu vena escritora?

Mi vida ha sido un poco rara. Durante la infancia y la adolescencia, prácticamente no tuve contacto con internet en casa. Por esta razón, mis entretenimientos principales fueron ver películas, leer libros y hacer música. Digamos que durante todo este tiempo estuve acumulando ideas en mi cabeza, hasta que con quince años me dio por escribir guiones de cine, a raíz de un profesor del instituto que era guionista y me contagió un poco su pasión. De hecho, empecé a grabar un cortometraje que iba sobre mafiosos y una nueva droga llamada “Drug-Orange.” Esta fue una etapa bastante solitaria y depresiva para mí, que se prolongó durante varios años. Como estaba en este plan, empecé a escribir guiones, que después empezaron a convertirse en historias más y más elaboradas. Finalmente, con dieciséis o diecisiete años empecé con el primer borrador de Akame, tras escribir unos cuantos relatos de terror (“La Tejedora del Velo Negro”, “El Amanecer de Minerva” y otros) a partir de varios dibujos que me hizo AndryWhoDraws (la ilustradora de Alfa&Omega y mi compañera en esta pequeña empresa).

¿Cuántos libros has publicado ya?

De momento, he autopublicado veintiún libros en Amazon, contando todas las versiones y variantes de algunos de mis libros. Ahora que mi vida se ha estabilizado un poco, he pegado el salto al mundillo editorial y estoy publicando Akame (Parte 1) con Europa Ediciones, como ya he comentado. La versión oficial ya está a la venta en Amazon, tanto en papel como en ebook, aunque hay distintas versiones viejas viajando por internet y Amazon desde hace años. Este mismo viernes 28 me van a entrevistar acerca de este libro; en cuanto tenga el video en mis manos, lo compartiré por mis redes para que todas las personas interesadas puedan verlo.

¿Cómo surgió tu interés por el género de terror?

Hace aproximadamente una década, yo tenía una importante turbidez en la cabeza, entre otras cosas, debido a las hormonas de la adolescencia y a las malas influencias que tenía a mi alrededor. No sé si fue por esta la razón principal, pero el caso es que empecé a interesarme por el cine de terror. Yo siempre he sido muy aficionado al cine, podía pasarme días y días viendo la misma película una y otra vez. Era algo obsesivo. Incluso me disfrazaba ocasionalmente, era como un ritual, pero esa ya es otra historia. El caso es que me dio por el terror. No recuerdo exáctamente qué fue lo primero que vi, pero estoy casi seguro de que fue algo de zombis o alguna película gore o slasher, y a partir de ahí la cosa ya fue degenerando. Cuando me harté de ver Viernes 13 y La Matanza de Texas, vi Halloween y alguna más por el estilo, y después me dio brevemente por George A. Romero. No muchos años después, aburrido del gore, me aficioné al terror asiático, y he de decir que este es mi género favorito desde entonces. Nada que ver tiene una película como Las Colinas tienen Ojos (el remake es bueno, pero la antigua me parece malísima) con cualquier película de Takashi Shimizu, como Ju-On, Reincarnation, Marebito y similares, que son todas geniales. Podríamos decir que aquí fue cuando encontré mi nicho ecológico, concretamente tras ver Ju-On y Ringu.

¿Qué es lo que más destacarías de “La tejedora del velo negro”?

Como he mencionado antes, “La Tejedora” nació como un relato, hace como siente años. La historia se da en un mundo ficticio, aunque con elementos del mundo real; podemos imaginarnos que la trama ocurre en algún paraje perdido de Estados Unidos, en el típico pueblo del desierto alejado de todo. Trata sobre una maldición que se origina en Villa Layledd, una aldea que está dominada por unos sectarios llamados “La Orden de los Jueces”, que se dedicaban a sacrificar supuestas brujas en los años de los Juicios de Salem, por allá en los siglos 17-18. Esta maldición, por diversas circunstancias, se hereda a la población actual de la región de Deception Valley, que es una Mancomunidad formada por el pueblo de Deception Valley (llamado comúnmente Deception) y el pueblo de St. Beauté, donde vive nuestra protagonista (Noah De Angelis). Villa Layledd está por allí cerca, a unos cuantos kilómetros de distancia. La historia trata esencialmente de la vida de Noah (de un oscuro pasado que quiere ocultar) y de cómo se ve afectada por la maldición, en la que Lilith, Samael y Naamah (algunos de los personajes infernales más importantes, según los mitos) están bastante involucrados.

En cuanto al estilo y a la forma, es una novela corta, en la que he mezclado distintos estilos literarios. El libro está estructurado en partes, más que en capítulos. Debido a que surgió como un relato, decidí mantener el formato, y así he tratado de que cada apartado sea como una especie de mini historia con su propia conclusión. A lo largo del libro, nos encontramos partes que están en formato diario, otras que simulan artículos de prensa o de revistas, informes psiquiátricos (con una estructura cogida directamente del mundo real) y otras partes que están escritas un formato típico (tercera persona pasado).

Portada de “La tejedora del velo negro” de Sangue Shi, ilustrada por Andry Who Draws.

¿Cuánto tiempo te ha llevado escribirlo?

El primer borrador del primer relato, donde surgió la idea, lo escribí precisamente hace seis o siete años, cuando me aficioné a las historias de fantasmas vengativos. Tras aquello, no volví a escribir nada relacionado con esta historia. Sin embargo, cuando empezó la cuarentena por el dichoso COVID, como tenía tiempo de sobra decidí continuar con la historia, porque me pareció que tenía potencial. Escribí “La Villa Maldita”, el relato donde asiento las bases de todo el tema de la maldición. Después escribí “Rigor Mortis”, una historia que en principio no tenía nada que ver (aquí es donde nace Noah). Después de eso, me quedé en punto muerto. Por un lado, quería desarrollar más la implicación de Lilith, Samael y Naamah en la maldición, y por otro lado, no sabía que hacer con “Rigor Mortis”, que había acabado con una conclusión que no me gustaba. Después de muchos arreglos, pensé “¿qué tal si juntamos todo esto?”, y eso fue lo que hice. Retomé la historia recientemente, y el mes pasado fue cuando la terminé.

¿Podemos esperar una segunda parte?

Creo que está confirmado, aunque aún tengo que meditar un poco al respecto. Hay personajes que quiero desarrollar más, porque casi la única protagonista del primer volumen es Noah, porque todo gira en torno suyo. También tengo algunas ideas que me parecen interesantes, ya no relacionadas directamente con la maldición, sino más bien como consecuencias de esta. “La Tejedora” trata sobre espectros vengativos y seres demoníacos, pero el siguiente quiero que tenga otro estilo. Lo más probable es que vaya a ser una historia de zombis poseídos por las fuerzas del infierno, pero eso aún está por ver.

¿Alguna anécdota que puedas contarnos?

Más que una anécdota que me haya ocurrido, hay una consecución de eventos relacionados con este libro que no dejan de asombrarme. La primera vez que publiqué esta historia, hace ya un año o dos, pensé publicarla en volúmenes cortos, y por ello subí a Amazon “La Villa Maldita”. Bien, pues las valoraciones que recibió fueron pésimas. Eso sí, nadie me dejó ningún comentario, por lo que yo no tenía forma de saber qué era lo que no había gustado supuestamente a la gente. Bueno, pues ahora, terminada la novela entera, corregida y republicada, me ha vuelto a pasar lo mismo. Valoraciones pésimas y ningún comentario. En esto, lo primero que hice fue pillarme un cabreo increíble, lógicamente. Incluso empecé a dudar de verdad si es que era una mala historia o qué es lo que pasaba. Sin embargo, poco a poco fui dándome cuenta de que el problema no era mío, y no lo digo por alimentar mi propio ego. Aquí entran en juego varias cuestiones:

Por un lado, hay mucha gente que se dedica a la “crítica” literaria como hobby, y que además lo hacen sin pensar en las consecuencias de lo que dicen. El otro día mismo me enteré de que había una persona por ahí en Twitter (no diré nombres ni nada) que había hecho una lista, una especie de “Top 10”, titulada “Los peores libros que he leído en 2021”. A esto yo me pregunto: ¿a quién puñetas se le ocurre hacer un “Top” público de “las peores cosas”? ¿Qué necesidad hay de hundir de esta manera a todos esos autores? Que a ti no te haya gustado un libro, no es justificación para que vayas y los pongas a parir. A cada uno le gustan cosas diferentes y punto. Con todo esto, lo que quiero decir es que, como ya sé por experiencia, hay muchos que se creen “críticos” solo por dar su opinión, la cual habitualmente es bastante ofensiva y poco realista.

Por otra parte, y directamente relacionado con lo anterior, me di cuenta de que la primera vez puse el libro gratis durante un tiempo, lo mismo que hice en esta segunda ocasión. Y el resultado fue el mismo. Es decir, que encima de que pones tu obra gratis, van y te valoran mal. Y además parece que la mayoría de los que valoran las obras son los que dan puntuaciones negativas, cosa que he comprobado en mi propia piel y que, cada vez más, veo que le ocurre a otros escritores.

La otra cuestión son las expectativas. He revisado el libro un par de veces y he llegado a la conclusión de que la gente se esperaba otra cosa, y lo digo con toda la sinceridad del mundo. No creo que sea una mala historia. Sin embargo, como ya he comentado antes, es un libro con una estructura un poco compleja y heterogénea, y no creo que la gente esté habituada a leer cosas tan raras. Además, Noah es un personaje que nunca fue creado para ser “la buena de la película” y que incluso puede llegar a caerte mal. Es una persona egoísta que solo piensa en sí misma, y que incluso puede llegar a ser algo manipuladora y despiadada.

En resumen, que parece que este libro está maldito. Por suerte, esto me ha ayudado a darme cuenta de que tengo que hacer menos caso a las críticas. A raíz de esto, como no iba a dejar que se quedara así, dije: “pues ahora voy a mandar un correo a elescritor.es para que me entrevisten, y además voy a mandar el libro a una editorial”, y eso es lo que he hecho.

¿Qué podemos encontrarnos visitando tu blog?

Coffee&Blood es un espacio de temática heterogénea, aunque principalmente subo: reviews de cine, algunos de mis relatos, artículos de crítica y entrevistas. También tengo allí información sobre mí y mis obras, así como alguno de mis libros subido entero. Últimamente la sección de entrevistas está abarcando la mayoría del contenido, porque no tengo tiempo para hacer todo lo que me gustaría. Pero la verdad es que estoy contento, porque estoy conociendo a gente interesante (escritoras y escritores, principalmente) y al mismo tiempo estoy creando contenido igualmente interesante. A parte de esto, lo más “novedoso” es que he publicado en papel la revista del blog, que está disponible en Amazon por si alguien muy friki de lo que subo quiere tener todo en físico.

¿Qué opinas de la sociedad actual para el trabajo del escritor?

La sociedad actual, tanto para los escritores y como para los artistas en general, me parece bastante complicada. Voy a hacer de portavoz de escritores e ilustradores en esta ocasión, porque conozco la situación de ambos. Los artistas que aún estamos en crecimiento, sobre todo los de mi generación y los que vienen detrás, hemos llegado al negocio en una época de decadencia en las redes sociales. Aparentemente, difundir tu arte por las redes es más fácil, pero en realidad no es así. Hay demasiada información circulando y el alcance al final se limita. Los “likes” han llegado a convertirse en una obsesión para todos nosotros en alguna ocasión, a pesar de que luego no significan nada. Si quieres dedicarte a esto, a escribir o a dibujar, te lo tienes que currar muchísimo. La gente no aprecia el arte, la población general no comprende que el arte es un trabajo y que tiene que ser pagado como cualquier otro empleo. Si no te conocen, porque no eres ultra famoso, la gente no te compra nada. Trabajamos horas y horas, para que luego nadie reconozca nuestro trabajo, y tenemos que vivir con ello y nos tenemos que aguantar. Me pongo enfermo cada vez que veo que por las redes hay gente que tiene la cara de exigir a los artistas encargos, pero que a la mínima no te quieren pagar porque de repente “no les gusta lo que has hecho.” La gente se cree que los artistas estamos aquí para darle el gusto a otros de leer algo o de ver una “buena obra”, y a cambio nos tenemos que aguantar cuando se ponen a criticar cualquier chorrada con absoluta ignorancia. Ya he comentado algo de esto antes cuando he hablado de los “críticos” de Amazon y de la gente que da su valoración sin pensar en las consecuencias, y ademá la mayoría de las veces vienen a contarte su vida y a quejarse de problemas personales. Y luego, encima, si te quejas hasta te pueden “cancelar”.

Más en referencia a los que escribimos, si nos queremos dedicar a esto de forma profesional no tenemos muchas opciones. Actualmente hay mucha auto-publicación independiente (como kdp, etc), y luego tenemos un montón de editoriales de “auto-publicación” que te ofrecen servicios bastante discutibles, ya que si quieres todos los servicios, al final tienes que pagar lo mismo que en una pseudo-editorial o en una editorial “grande”. Y en las editoriales de renombre, como pasa con todo, si no eres famoso tienes que pagar un pastón o sufrir hasta que te hacen caso. Y si no tienes pasta, pues no hay nada que hacer. En el mundillo del arte estamos obligados a invertir mucho tiempo y mucho dinero. Pero claro, no siempre sale rentable. Más bien, diría que la mayoría de las veces perdemos dinero.

¿Qué consejo te gustaría darle como escritor a tu yo de hace unos años?

Le diría que siguiese haciendo lo que está haciendo. No tengo nada que reprocharle, porque las personas somos diferentes cada día, y en cada momento de la vida lo que consideramos adecuado puede ser distinto. No me arrepiento de nada. Quizás le diría que estudiase un poco más para los exámenes y que hiciera los deberes, en vez de fantasear tanto y beber demasiado café. También le diría que no se gastase el dinero en los anuncios de Facebook e Instagram, que al final no le van a servir de mucho. Sobre todo, le daría las gracias por ser tan insistente y no dar nunca su brazo a torcer. También me disculparía de antemano por su destrucción, que en parte era necesaria, y le prometería que en el futuro todo sería un poco mejor. Escribir y vivir son cosas parecidas, de la práctica surge la virtud.

¿Qué autores te han inspirado más a la hora de escribir?

Como ya dije hace tiempo, nunca fui mucho de seguir autores literarios, hasta ahora, que leo más y sigo más autores concretos. Mis obras siempre han estado influenciadas más por películas que por novelas. La saga “Ju-on (The Grudge, The Curse, El Grito, etc)” de Takashi Shimizu fue una importante influencia para mí cuando escribí Akame (a peas de que no es una novela de terror), y de alguna manera lo sigue siendo a día de hoy; admiro mucho el trabajo de este señor. También tomé elementos de Silent Hill, Resident Evil y Star Wars para desarrollar el universo de Alfa&Omega, y quizás algo de Christopher Paolini (autor de “Eragon”). Sin embargo, creo que puedo decir que el autor que más me ha marcado la vida ha sido Edgar Allan Poe, tanto en su estilo como en la temática de sus obras. Por otra parte, Mary W. G. Shelley se ha convertido en una mis influencias constantes en los últimos años. En cuanto a “La Tejedora”, la verdad es que no sabría decir. Se notan algunos elementos de Takashi Shimizu y, diría yo, algo de Stephen King, principalmente en esa mítica forma de presentar a los personajes y los lugares en su cotidianidad. De hecho, hace no muchos meses terminé de leer “Cujo”, así que probablemente aún me quedaba algo del señor King en las venas.

¿Dónde se puede conseguir tu libro?

“La Tejedora del Velo Negro”, al igual que casi todos mis libros, está disponible en Amazon, tanto en papel como en ebook. Veremos si próximamente no está también en librerías junto a Akame.

¿Estás trabajando en algún nuevo proyecto?

Actualmente estoy revisando uno por uno todos los libros de Alfa&Omega, y cuando termine de hacerlo subiré a Amazon los que no están publicados. Terminé de escribir “Akame (Parte 6)” y empecé a escribir “Legado (Parte 2)”, pero lo dejé porque quería acabar “La Tejedora”. Probablemente continúe con ello de aquí a unos meses. Aparte de todo esto, tengo pensado mandar cuanto antes otros dos libros de la saga a alguna editorial, que creo que ya va siendo hora.

Hoy me ha dado la vena mientras me duchaba y he empezado a escribir otra cosa, algo que en un futuro me gustaría que fuese una historia con una de mis escritoras favoritas como protagonista. Y a parte de esto, estoy pensando en traducir al castellano sus diarios y cartas, que solo están en inglés.

Para terminar, ¿nos recomiendas alguna lectura?

Recientemente he terminado de leer “El Cuento de la Criada” de Margaret Atwood, un clásico de la ciencia ficción, o eso dicen. Lo recomiendo. Me ha parecido un libro interesante, con un estilo bastante particular y con una historia que perfectamente podría ser la vida de alguna mujer en alguna sociedad actual. Ahí lo dejo.

Haciendo una mala comparación con otro “clásico” que no tiene nada que ver, diría que me ha gustado muchísimo más que “Fahrenheit 451” de Bradbury, para que os hagáis una idea.


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