“Mariela envenena mis sueños”, obra primogénita del escritor Jordi Cicely
Para quién no te conozca, ¿quién es Jordi Cicely?
Me llamo Jordi Cicely, soy de Lugo, friolense de corazón, afincado en Ferrol y soy Subalterno de la Xunta de Galicia, anteriormente trabajé en aviación, como agente de pasaje para Easyjet en el Aeropuerto de Gatwick en Londres. Éste último fue sin duda el trabajo que marcó un antes y un después en mi vida y que coincidió con mi despertar como escritor.
Soy una persona que detesta la hipocresía, la mentira y la sociedad de lo políticamente correcto que nos han impuesto con calzador. Puedo presumir de ser alguien muy tenaz y perseverante, creo que la mayor parte de las cosas bonitas que me han pasado en esta vida ha sido porque nunca he cesado en el empeño y aunque hay otras que no me salieron, nunca diré por mí no ha sido.
Sé que muchos ven como un defecto algo que me encanta de mí mismo y es que soy de los que no me canso de protestar si algo no me gusta o me molesta, no me callo, voy de frente…
Me considero muy pasional e intenso, aunque ahora bastante menos que hace unos años. Por suerte pude controlarlo, aun así, no dejo de amar con fuerza las cosas que me gustan y me dan la vida. Hay tres grandes pasiones que me acompañarán siempre: la música, los viajes y la escritura, además tuve y tengo en muchas ocasiones, la suerte de poder convivir con las tres al mismo tiempo, por lo cual me siento muy afortunado.
Pero el mejor adjetivo para describirme es el de soñador, no he dejado de hacerlo, ni un minuto en mi vida y aunque a veces vuelo y los pies dejan de tocar el suelo, luego encuentro algo a lo que agarrarme.
¿A qué edad empezaste a escribir? ¿Cómo nace esa necesidad de plasmar en un papel lo que se te pasa por la cabeza?
Comencé a escribir con 27 años porque una terrible crisis de ansiedad me mataba, no sabía qué hacer y entonces comencé a escribir, noté que era de las pocas cosas que me aliviaban aquel dolor interno que no me dejaba ser feliz, era como un paréntesis de tranquilidad en medio de un infierno. Lo tengo que decir, y es que, gracias a la ansiedad en mayor o menor medida, hoy soy escritor, ha sido algo terapéutico, aunque también en cierto modo quería ser como Jack Kerouac o cualquier otro escritor de la Generación Beat. Quedé enamorado de esa escritura desde que tenía 19 años y leí por primera vez “En el camino” de Kerouac. Aquello fue una sacudida a mi cabeza que partió mi vida en dos, ya que sabía por primera vez que dirección tomar y lo que quería hacer… y era escribir y viajar. Piensa en un chico corriente que con 19 años no sabe qué va a hacer de su vida, pues yo desde el momento en que cerré aquel libro ya no era así.
Digamos con esto, que hubo dos grandes momentos que me llevaron a escribir, descubrir a la Generación Beat y mi ansiedad, juntas formaron una tormenta perfecta de inspiración y estilo de vida.
Luego está mi alta sensibilidad, desde hace muchos años está ahí. Después de mi primer ataque de ansiedad, se manifestó en mí una necesidad de escribir todo aquello que me pone la piel de gallina y me impacta emocionalmente, así nacieron muchos de mis primeros relatos. Quería plasmar con la escritura lo que en ese momento determinado me atravesaba el corazón para que no se me olvidase con el tiempo y así hago desde entonces. Es algo impulsivo que sale de mi interior sin mucho esfuerzo, siento como si mis sentidos se agudizasen al cien por cien para captar cada detalle, por eso la mayor parte de mi literatura tiene ese toque emocional y existencial.
Hablemos de tus obras. ¿Cuántos libros has publicado ya?
Esta es mi primera obra, lo que se llama intelectualmente una ópera prima, pero antes de esto, tuve un montón de relatos que han ido perfeccionando mi técnica a la hora de narrar y poder crear un estilo que intento sea muy personal. Todos esos escritos los tengo en mi blog literario www.cosasquetecontealoido.com y aunque esto no se puede considerar como un libro, sí lo veo como una parte importantísima de mi obra literaria, casi todo nació ahí y lo que soy también.
Me he volcado como un loco para defender mi primer libro a muerte, porque necesitaba contar esta historia, era como algo obsesivo cuando comencé a escribirlo, por eso llevo tantos años trabajando en esta novela, pero esto no se queda aquí, ya te puedo adelantar que habrá más libros.
¿Qué es lo que más destacarías de “Mariela envenena mis sueños”?
Sinceramente no sabría enumerar de golpe porque hay un montón de cosas que guarda esta historia entre sus páginas. Podríamos empezar por que en la trama principal habla del sufriendo a causa del desamor, pero éste corre a través del corazón de un hombre. Saber que los hombres también sufrimos por desamor en cierto modo es alentador, pues ya no se nos ve como rocas insensibles y es algo que agradezco, porque yo nunca fui una roca ni quiero serlo.
También está la manera de abordar el apego, la idealización y la obsesión, que son tres emociones que hay que evitar si quieres que el amor sano aparezca. Cada una de estas tres se respiran en todo el libro y llevan por el camino de la perdición y el sufrimiento a Jairo, el protagonista.
También me gustaría destacar el tema de la soledad, que está latente de una forma muy sutil en toda la narración y se puede ver en el comportamiento de los dos personajes principales, que se ve como intentan escapar del fantasma de la soledad en cada uno de sus comportamientos. Buscan a alguien desesperadamente, aunque sea tirándose a los brazos de desconocidas sin estar curados de la persona que los ha dejado y no pueden olvidar. Esto que sale en el libro es algo muy presente en nuestra sociedad, lo ves en mucha gente que la han dejado y no saben estar solos con ellos mismos, están buscando constantemente a alguien con quien acostarse, liarse o simplemente whatsapear. Una de las cosas que aprendí del budismo, que es la religión que practico, es que en el silencio se encuentra la respuesta.
Quizá, una de las cosas que más destacaría en esta historia es la música, hay un montón de canciones que se van nombrando a medida que van pasando las páginas y todas tienen un porqué, porque todas guardan una emoción concreta para los personajes a los que envuelven. Con esto, puedo afirmar que esta novela también puede incluirse dentro del género musical.
Pero en el campo emocional, sin dudarlo, lo que más destacaría es que puede ser una historia curativa o ansiolítica, de hecho, me he enterado que hay un par de psicólogas en Galicia que la han estado aconsejando a pacientes que llegan a sus consultas con grandes problemas de apego o idealización causadas por rupturas amorosas. Saber eso me pone los pelos de punta, porque veo que esta novela también sirve para que alguien se abrace a ella como yo lo hice cuando la escribí. Me encanta la idea de saber que puede ayudar a encontrar el camino a la curación o hacer reflexionar, que muchas veces, esto último es más importante.
¿Hay alguna anécdota sobre el proceso de documentación o de escritura que puedas contarnos?
Sí y lo más importante es que estuve a punto de volverme loco escribiendo “Mariela envenena mis sueños”, no me sentó nada bien escribirla, de hecho, en un momento estuve muy cerca de enfermar emocionalmente. Creo que estuve a un paso de volverme loco como una especie de Brian Wilson literario, recuerda que el genio de los Beach Boys se volvió tarumba cuando grababa su álbum “Smile”, buscaba una perfección absoluta en aquel álbum. Yo también llegué a obsesionarme con lo mismo durante meses, pero lo que realmente me estaba matando era la carga emocional que le estaba dando para que quedase totalmente impregnada entre las hojas. Esta historia arrastra mucho dolor, habla de un corazón secuestrado y un alma rota que caminan por un desierto que no parece tener fin. Lo notas cuando lo lees, que ves que te deja por momentos una sensación muy desagradable, pues imagina cuando tienes que volver a recordar muchos de esos momentos para escribirlos y darles la mayor fuerza y veracidad posible, dicho esto, uno se hace una idea de la locura que fue escribir partes de este libro en el que me dejé media alma entre sus páginas, aun así, necesitaba hacerlo, fue como un exorcismo emocional que tenía que pasar para volver a la vida. Digamos que fue bueno y malo a la vez, pero necesario.
¿Esta es una historia de amor o de desamor?
Una historia de desamor, sin dudarlo. Lo ves desde el primer párrafo de la primera página, quise que el lector o lectora supiese desde el principio que se iba a enfrentar a algo duro.
El personaje sufre por desamor, por la falta de amor, cuando sufrimos lo hacemos por eso, nadie sufre por amor, el amor es algo bueno y cuando este existe todo está bien y funciona, luego el amor puede ir desapareciendo, diluyéndose…entonces ya entramos en la fase de desamor, aunque la gente lo confunda.
A medida que vas adentrándote en la historia, comprendes más y más el dolor que arrastra Jairo, incluso su compañero de aventuras Ángel. Sus corazones llevan cicatrices que no han cerrado del todo y eso es el desamor en estado latente.
La presencia en toda la obra de la idealización, la obsesión y el apego es la mayor muestra de la fuerza que tiene el desamor, si aparecen estas tres emociones, el amor no tiene cabida, se ha ido. Siempre idealizamos a las personas más miserables que han pasado por nuestras vidas, lo mismo pasa con el apego y la obsesión, creo que actúan como una especie de sedal fuerte al que intentas estar enganchado con la otra persona, cuando eso es un error, una auténtica mierda, a lo único que te lleva es a un estado emocional de montaña rusa y eso es una locura. El amor es tranquilidad.
Hemos visto que no es un libro políticamente correcto ¿Está pensado así?
Por supuesto. Detesto esta cultura de lo políticamente correcto que parece tenemos que tragar sí o sí y yo me niego. Me niego a pensar que no podemos escribir o decir sobre determinados temas o enfocarlos de una manera diferente, parece que hay como una inquisición que revisa cada cosa que haces y que te dice lo que puedes y no puedes poner. Me revelo ante esto, por eso mi libro trata temas escabrosos de una forma fría como la prostitución, los micromachismos, la soledad…siempre quise hacer un libro que molestase, que dejase un resquemor dentro y eso creo que lo conseguí con creces, aunque por otra parte eso ha hecho que no pudiese ser editado por editoriales grandes, pero si quieren otro libro distinto a este, yo me aparto.
No quiero entrar en ese círculo de medir cada palabra o adjetivo que pongo por si alguien se ofende, quiero poner lo que pienso, lo que siento, contar una historia de una forma determinada y si alguien le parece mal, que le den por culo.
Mariela es una historia cruda, desnuda, sin maquillaje, que va de frente y no repara en nada ni nadie, una ráfaga de aire fresco a un mundo ofendido cerrado herméticamente de moral.
Si no les gusta la historia que se lean otra, si no les gusta el escritor que se busquen a otro. Pero Mariela es así y así hay que masticarla.
Hemos visto la fuerza que tiene Mariela en la historia ¿existe realmente?
Mariela existe. Todos mis personajes están inspirados o son copias exactas de personas que pasaron por mi vida, no lo voy a negar, me gusta escribir sobre ciertas personas que conozco y que me inspiran, creo que es una forma de bonita de dejarlas marchar, que es lo que es al fin este libro, una despedida de personas, estados, momentos y dolores. Un ciclo que se cierra.
Todo el mundo me pregunta por la verdadera Mariela y siempre digo que nunca diré quién es. A mi parecer, creo que esto pasa porque todos tuvimos o fuimos Mariela en nuestras vidas, ya que Mariela es ese amor que se queda metido en tu cabeza y no puedes quitártelo ni con un exorcismo a pesar de no haber sido sano, algo se ha formado en tu cabeza y no tiene nada que ver con la realidad, también es esa historia que recuerdas años después, cuando todo se ha calmado y te preguntas ¿cómo he podido perder la cabeza por algo así?
Pero creo que los más interesados en saber de la verdadera protagonista son los lectores y lectoras que leen el libro, es como si quisieran saber que ha sido de ella, a mí todo eso me da igual, lo vuelvo a repetir, les interesa eso más a ellos que a mí. Mariela pertenece a un pasado que se ha cerrado y ha quedado impregnado en las páginas de este libro, nada más. A medida que transcurre esta historia, verás que hacia el final aparece el perdón, a uno mismo y a la persona que hace daño, perdonar es mirar atrás sin odio y conseguirlo es una liberación. Mariela es un estado de ánimo.
¿Qué le diría a día de hoy Jairo a Mariela?
Nada…¿qué necesidad hay de hacerlo? Mariela es una historia pasada y superada y cuando eso ocurre ya no hay necesidad de decir, recriminar o esperar nada. Y lo mejor de todo es que no pediría explicaciones, porque todas esas preguntas que tenía rondando en la cabeza hace tiempo cuando comenzó esta historia, hoy ya no importan sus respuestas lo más mínimo, se han convertido en algo indiferente para la conciencia. A esto, vuelvo repetir, se le llama perdón y es un estado al que muchas veces es muy difícil llegar. A Jairo le costó una larga travesía por el desierto para llegar a esta conclusión.
Mariela envenena mis sueños está siendo un éxito en Galicia ¿A qué se debe?
Creo que hay varios factores, comenzando por que esta novela la han rechazado 53 editoriales, a veces he tenido que oír auténticas tonterías como “tu historia no le interesa a nadie, nadie te la va a comprar” y cosas así, que no hicieron que yo me volcase aún más en ella y no parase de trabajar durante años. Soy muy tenaz y perseverante como he dicho y no paré hasta que salió con una buena y seria editorial como es Editorial Fanes.
Luego está su temática, hay pocas novelas que leas y se pueda ver tan bien el interior del escritor, que este caso me he abierto en canal para que viesen lo que arrastraba dentro en aquellos tiempos y con eso creo que se identificó mucha gente que sufre en silencio, al igual que la historia habla del sufriendo amoroso visto desde la perspectiva de un hombre y eso es muy poco común en estos tiempos, parece como que se quiere tapar y no sé muy bien porqué, porque tendría que ser al revés, aun no estamos preparados para ver el corazón de un hombre sangrando de dolor y eso es una lástima. Pero creo que ahora con mi historia eso está cambiando al fin. Los hombres sufrimos, padecemos y lloramos.
Galicia y América Latina llevan unidas y hermanadas desde hace décadas, ¿cuántos emigrantes han dejado Galicia para buscarse la vida en Cuba, Argentina, Uruguay, México? Ese lazo de unión de la historia de desamor entre un gallego y una uruguaya que transcurre en Cuba es muy apetecible en Galicia y en Latinoamérica también.
Hablemos ahora un poco sobre ti. ¿Crees que ahora los escritores lo tenéis más fácil para triunfar gracias a las redes? ¿O que precisamente eso hace que haya más competencia y cueste más diferenciarse?
Creo que hay un poco de las dos cosas, por una parte, internet es un escaparate inmejorable para darte a conocer como autor y llegar a gente que de otra manera era imposible antes. Nunca sabes quién te está leyendo a través de las redes, incluso en alguna ocasión pueda ser alguien que pueda darte ese empujón definitivo.
Por otro lado, hay mucha gente escribiendo, nunca como ahora hubo tantos libros en el mercado, las editoriales de autopublicación y por encima de todo Amazon, unas y otras han roto el mundo editorial que venía de décadas atrás. Por esa razón, es muy difícil dejarse ver, para hacerlo tienes que destacar, diferenciarte de los demás y crear tu propia imagen, yo lo conseguí gracias a mi blog www.cosasquetecontealoido.com, sin querer y queriendo fui abriéndome camino en la escritura y mucha gente me conoció gracias a ello.
¿Qué consejo te gustaría darle como escritor a tu yo de hace unos años?
Que no se obsesione con llegar a lo más alto con la escritura, que, en vez de eso, disfrute el momento de escribir, es infinitamente más bonito el camino que llegar a la meta. Recuerdo que cuando comencé a escribir y sobre todo reescribir “Mariela envenena mis sueños” no paraba de pensar una y otra vez en el día que saliese publicada, que fuese un éxito de ventas o que firmase por una editorial grande como Planeta. Todo aquello no me dejó disfrutar al completo de la bonita experiencia de ponerte delante de un ordenador y teclear, algo tan sencillo como eso, pasaba casi desapercibido y eso no puede volver a ocurrir.
También le diría que no se deje afectar por la cantidad de imbéciles que te encuentras por el camino y que te dicen con aires de superioridad que tu historia no vale, que no interesa, que nunca fichará por una editorial seria. Tengo que admitir que tuve que escuchar cosas como esas y en su momento me afectó muchísimo, pero hoy ya no me importa una mierda lo que me digan, por mucha personalidad literaria que sea. Es más, hoy me río y sigo mi camino que tengo marcado, ya no hago caso a las críticas maliciosas, ni frío ni calor, indiferencia total, algo que aprendí del Sr Marsault, el protagonista de “El extranjero” de Albert Camus.
Parece que si no vendemos un montón de libros o no se ficha por una editorial Top no se triunfa en la literatura, a mi esa tontería ya me pasó, se triunfa cuando se termina de escribir una historia, alguien la lee y se identifica con ella, eso es un triunfo absoluto y un subidón de autoestima enorme. En las cosas más sencillas se encuentran las victorias más aplastantes. Nunca fui tan feliz en la escritura como cuando comprendí que el mayor placer es escribir en el momento sin pensar en lo que vendrá después.
¿Qué autores te han inspirado más a la hora de escribir?
Jack Kerouac y el resto de escritores de la Generación Beat, como ya dije, la prosa espontánea de Kerouac me partió en dos, la primera vez que lo leí me dije para mí mismo “yo quiero ser como este tipo”, con esto, ya estaba todo dicho. Me han influenciado en mi escritura, pero también en mi estilo de vida, durante unos años fue algo casi obsesivo, hoy más adulto, separé mucha paja y me quedé con lo esencial para seguir tomando un modelo de escritura.
Pero aparte de ellos, me apasiona también Albert Camus, puedo decir que su obra “El extranjero” es mi segundo libro preferido después de “En el camino”. Ya sé que ambos no tienen nada que ver, pero me apasionan los dos, Camus es más intelectual, un premio nobel que convive con la filosofía y esto es para mí, la otra parte de la balanza que se contrapone a la Beat Generation que era todo lo contrario.
Y no me puedo olvidar de la poesía de Arthur Rimbaud, me vuelve loco su simbolismo salvaje, es el autor más anti políticamente correcto que hay. Hubo un tiempo que escribía poesía porque quería hacer algo parecido y de hecho tengo unos cuantos poemas que podrían salir en un futuro libro, pero de momento se quedan ahí.
¿Dónde se puede conseguir tu libro?
Se trata de una edición tradicional hecha por Editorial Fanes, lo cual quiere decir que se puede conseguir en librerías, El Corte Inglés, La Casa del Libro, Fnac y Amazon. También estará disponible en unas semanas en Kindle como libro electrónico.
¿Estás trabajando en algún nuevo proyecto?
Estoy escribiendo en lo que puede ser la continuidad de “Mariela envenena mis sueños”, una historia unida por un fino hilo pero que puede leerse independientemente de esta primera. El protagonista es el mismo, Jairo, que regresa un verano después de lo ocurrido a su pueblo. Quiero hacer una serie de libros que hablen de diferentes estados de un duelo emocional con un mismo personaje y es lo que estoy haciendo.
De momento llevo 96 páginas, lo retomaré otra vez cuando termine la promoción de Mariela, ya que entiendo que cada momento es para lo que es y ahora estoy volcado en esta novela, cuando la exprima a más no poder, entonces retomaré mi segundo libro, pero para eso aún faltan meses.
Para terminar, ¿nos recomiendas alguna lectura?
Cada libro es para cada persona, no puedo ni debo recomendar ningún libro, pero si me obligan a hacerlo, por supuesto que diré el mío “Mariela envenena mis sueños”, y más que nada a la gente que me sigue en redes desde hace mucho o leen mi blog, porque sé que buscan algo dentro de ellos y creo que ahí pueden encontrarlo o al menos, el comienzo del camino.
Pero si queréis de otros autores, me quedo con dos libros que han sido cruciales en mi vida: “En el camino” y “Los Subterráneos”, ambos de Kerouac. Nunca sabré describir con total precisión lo que sintió mi corazón al leerlos, ni voy a intentarlo, sería muy injusto con aquella dulce emoción que se posó en mi cuerpo…
¿Te gustaría conocer las apasionantes historias de escritores modestos, pero no por ello menos buenos?
Únete a nuestro canal de Telegram (es gratis) para ayudarnos a darles voz a esos escritores que necesitan un empujón. Sus vivencias e historias para publicar sus libros, su pelea para hacerse un hueco y su mensaje es igual o mejor que el de cualquier top ventas. Únete a nuestro canal para descubrirlos y apoyarles.