Jesús M. Cabrera, nos habla de “Laetitia”, obra que ha publicado con la editorial Círculo Rojo.
- Tu trayectoria abarca diferentes formas de arte, desde la música hasta la actuación. ¿Cómo influyen estas experiencias multidisciplinarias en tu obra poética en “Laetitia”?.
Siempre he creído que todas las artes están muy relacionadas, por tanto, hay parte de mi trayectoria en el poemario, sin duda. Pero lo que más influye cuando escribo poesía, es la música y el canto. Llevo cantando toda mi vida, desde los cuatro años, y cuando hago un poema, mientras busco la rima que más me gusta para lo que intento expresar, tanto consciente como inconscientemente, busco la musicalidad, que el poema tenga una rima interna, además de la externa. Por eso me gusta menos la poesía libre, sin rima, porque me limita un poco más a la hora de escuchar esa música en el poema.
- “Laetitia” es descrito como más que un poemario, sino como una búsqueda personal de la “alegría interna”. ¿Qué te motivó a explorar este tema en particular y cómo influyó en tu proceso creativo?.
“Laetitia” es más que un poemario, al menos para mí. Si que me gustaría que, en la medida de lo posible, también tuviera ese punto extra para las personas que lo lean o escuchen. “Laetitia” es una catarsis, una liberación interior y mi forma de superar la pérdida de un ser querido, mi padre. Realmente, fue un proceso largo. Mi padre falleció en el año 2007. En 2008/09 le dediqué un poemario, que llamé “Evolución” y que aún no he publicado, bastante más complejo del que ahora hablamos, en el que abordo el tema de la muerte y en el que hago un repaso de mi vida desde que nazco hasta ese momento. Por esto, en el año 2010, realizo “Laetitia”, tras pasar por el duelo y asimilar la pérdida, tuve la necesidad de superarlo totalmente a través de la alegría, del júbilo interno. Me pareció la mejor manera de superar un bache emocional. “Laetitia” es la expresión en palabras, de esa búsqueda, de esa “Alegría interior”, que quería transmitir a los demás. Sería perfecto si este poemario le sirve a una sola persona para conseguir su propia “Alegría”.
- ¿Cómo describirías el estilo poético que utilizas en “Laetitia”? ¿Hay alguna influencia específica en tu escritura poética?.
Pues si me permiten la licencia, creo que mi estilo es “ jesuliano” o, al menos, eso intento. Creo que eso es común en la mayoría de artistas y creadores, todos queremos dejar nuestro sello, y creo que eso es bueno. Si tuviera que definir mi poesía creo que lo haría como “un clásico con toques modernos”, pero sin formar parte de ningún grupo o corriente, o estilo poético concreto. Utilizo las formas poéticas que, entiendo, mejor se adaptan a lo que quiero expresar. En cuanto a las influencias, son muchas. Creo que la mayoría de los poetas bebemos de nuestros anteriores insignes poetas. A mí me gustan mucho los clásicos, sobre todo Jorge Manrique, Quevedo, Góngora, hay muchos. De los más modernos, Blas de Otero, Luis Cernuda, Pablo Neruda o Rafael Alberti. No puedo dejar de mencionar a los autores de mi tierra como Saulo Torón, Domingo Rivero o Manuel Padorno.
- La poesía tiene el poder de conectar con las emociones de los lectores. ¿Cuál es el mensaje principal que esperas transmitir a través de tus poemas en este libro?.
Ojalá mi poesía tuviera tan gran poder. Sería muy bonito, sinceramente. El mensaje que quiero transmitir con este libro, es que somos capaces de superar los baches emocionales de una manera positiva. No digo que no haya que pasar por el dolor, la tristeza, etc, todas emociones necesarias e inevitables, que cumplen una función determinada. Lo que sí digo es que, mediante la alegría, podemos superar todos los avatares de la vida o, al menos, sobrellevarlos. Creo que la alegría es una gran herramienta de salud psicológica.
- ¿Qué papel juega la poesía como medio para compartir y expresar emociones en tu vida personal?.
La poesía tiene una gran importancia en mi vida personal. Es un medio de conocerme mejor, de aclarar qué estoy sintiendo, cómo me afectan las cosas que me rodean, las relaciones con los demás. Es una manera de entender mi vida y mi función dentro de esta sociedad, del mundo. Es uno de mis modos de expresarme, el otro importante, es el canto. Cuando creo que lo expresado en mis poemas tiene calidad y puede servir a otras personas, lo comparto, antes solo lo compartía con un círculo cerrado de personas, familiares y amigos, pero creo que es un error guardar los poemarios en un cajón.
- Mencionas que “Laetitia” puede ser un consuelo para aquellos que pasan por momentos difíciles. ¿Cómo crees que la poesía puede ser un refugio o una guía para las personas en tiempos difíciles?.
Sí, así lo creo. La poesía, o cualquier tipo de arte, es expresión de lo que un ser humano siente, piensa o cree, en un momento concreto de su vida. A veces, como en esta obra, hay un deseo de conseguir algo con su creación, tiene un objetivo marcado. El resultado, mis poemas, pueden llegar o no a alcanzar ese objetivo, depende de la personalidad y gustos de cada uno, y de si he sabido expresar correctamente lo que quería.
Para mí, este poemario, fue un remanso de paz, fue un sedante y un punto de inflexión. Otras personas, amigos y conocidos, me han dicho que les ha servido en ese sentido, gente que estaba pasando un mal momento, por ejemplo, me han dicho que les ha parecido reconfortante. Eso me parece maravilloso. Me dejan sin palabras. La única forma de que sea un refugio o guía para otras personas, es identificándose con los poemas, viviéndolos, dejándose llevar por su música.
- ¿Hay algún poema en particular en “Laetitia” que sea especialmente significativo para ti? ¿Por qué?.
Es difícil elegir un poema, pero creo que el que más resume mi estado de ánimo en ese momento y la búsqueda en la que estaba inmerso, es el Soneto III. Luego, la parte que me parece más conseguida en todos los sentidos, es la segunda parte, la de los Haikus. Por la dinámica que tienen esas formas japonesas, creo que son la mejor forma de transmitir lo que quería.
- Has explorado tanto la música como la actuación. ¿De qué manera encuentras que la expresión artística en la poesía difiere o se asemeja a estas otras formas de arte en las que te has desenvuelto?.
Creo que el proceso a la hora de expresar algo es el mismo, lo que difiere es el medio, el modo de expresarlo. Tienes que empaparte bien de tus propias emociones, tienes que hacer un esfuerzo personal, de búsqueda, de ver qué te pasa, en el caso de que quieras expresar tus propias emociones o pensamientos. Otra cosa distinta, es cuando tienes que interpretar algo creado por otra persona, ahí tienes que entender qué quiso expresar, que quería decir, esa obra, ese personaje, ese poema. Como digo, creo que el proceso es el mismo, lo que varía es el modo de expresarlo y, por supuesto, las técnicas y medios que debes conocer y/o emplear para transmitir lo que deseas.
En la poesía, lo importante es la palabra, pero también en el teatro, y también en la música. El teatro puede ser poesía recitada, la ópera es teatro cantado.
- ¿Cuál fue tu mayor desafío al escribir “Laetitia”? ¿Hubo algún obstáculo que superaste durante el proceso creativo?.
Mi mayor desafío con “Laetitia”, fue intentar utilizar un lenguaje sencillo que pudiera llegar a la mayor gente posible. Reconozco, aunque no suelo darme cuenta, que mi poesía suele ser complicada o difícil, con muchos mensajes internos difíciles de encontrar, incluso para personas que me conocen bien. Creo que conseguí, al menos en parte, superar ese obstáculo. Es un poemario que puede leer cualquier persona, incluso si nunca han leído poesía. Esto me produce gran satisfacción. No fue fácil, pero mereció la pena.
- Finalmente, ¿cómo ha sido tu experiencia publicando con la editorial Círculo Rojo? ¿Qué aspectos destacarías de trabajar con esta editorial para otros escritores aspirantes?.
Mi experiencia ha sido positiva, en general. Lo que más me ha gustado, es la libertad creativa en todo momento, nunca hubo imposición por su parte. Quizá influya que son una editorial autoedición. Esa libertad a la hora de tomar decisiones sobre uno u otro aspecto del libro, portadas, maquetación, distribución, etc, me da mucha tranquilidad.
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