El escritor, Vicente Manjón Guinea, nos habla de su obra “Una lluvia fina y mentirosa”
Para quién no te conozca, ¿quién es Vicente Manjón Guinea?
(Madrid, 9 de noviembre de 1968). Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid y licenciado en Criminología por la Universidad Camilo José Cela de Madrid.
He trabajado en prensa en diversos medios de comunicación tanto de prensa escrita, televisión o internet.
Actualmente se dedica a la peritación judicial, especializado en robos y fraudes. Así mismo, vinculo mi profesión a la educación y reinserción de menores infractores en la Consejería de Justicia de la Comunidad de Madrid.
¿Cómo nace tu vena escritora?
Comencé a escribir desde antes de entrar a estudiar Periodismo en la Facultad. Generalmente artículos de actualidad y relatos. Pero me he lanzado a publicar los ensayos, novelas y cuentos de relatos que tenía escritos ahora. Es cómo haber sentido de nuevo el impulso indomable de la literatura después de desvincularme de él por circunstancias personales y profesionales. En el caso de “Una lluvia fina y mentirosa” era una pequeña historia de unas 100 páginas que en este verano pasado he retomado para convertirlo en novela definitiva.
Más o menos habré estado dedicado a ella un año, hasta mandarla a la editorial. Puede que se me demorara un poco más ya que actualmente me encuentro escribiendo otra novela que es bastante extensa de momento y espero tenerla terminada para finales de este año.
¿Cuántos libros has publicado ya?
Este es mi segundo libro y mi primera novela. A principios de año publiqué el ensayo literario “De la literatura y las pequeñas cosas”, que se puede adquirir al igual que la novela en cualquier plataforma por internet. Amazon, El Corte Inglés, FNAC o Casa del libro. Evidentemente también en la propia editorial Círculo Rojo
¿Qué es lo que más destacarías de “Una lluvia fina y mentirosa”?
Como reza la propia contraportada del libro el argumento se construye en derredor de un personaje principal, que llega a un bar bajo la lluvia. A partir de ahí se elabora un universo complejo y poliédrico con altas dosis de contenido subjetivo y psicológico de todos y cada uno de los personajes que frecuentan ese bar de Lavapiés.
Las vidas de unos y otros se van entrecruzando, formando un puzle hasta desvelar un oscuro y duro secreto.
En el libro se puede apreciar los bajos fondos del mundo de la pobreza y la droga, la degradante vida de un policía, el mundo de los estudiantes con la diferencia entre quien tiene las espaldas cubiertas y quien no… y el MAL, con mayúsculas y vestido de embaucadoras palabras y trajes de burguesía.
¿Alguna anécdota que puedas contarnos?
Una anécdota… En el libro un personaje lleva tatuado un escudo nobiliario. Hay muchas interpretaciones y ramificaciones de la genealogía, pero que cada uno lo interprete a su gusto e imaginación según la difuminada descripción. Es evidente que todo es ficción.
¿Qué pretendes provocar en el lector con la lectura de tu obra?
Por su puesto la rebeldía ante el abuso. Sobre todo, en lo social. Mi intención es despertar en el lector el punto de rechazo ante la fuerza de los más poderosos socialmente hablando, los cuales siempre se ven respaldados por las leyes y el dinero. Pero también quiero sacar a la luz el desprecio de esa gente sin corazón hacia sus propios familiares y allegados. La gente de mala calaña que no les importa vender los sentimientos de los más débiles ni trapichear a costa de la necesidad de los demás. En todo este manto lúgubre, por supuesto que asoma un pequeño rayo de esperanza.
¿Qué te ha inspirado para escribirlo?
El libro ha estado inspirado en una noticia de prensa o varias sobre un tema tan doloroso como puede ser la manipulación del ser humano y el abuso sobre los más débiles. No voy a expresar que tipo de injusticia es la principal pues desvelaría el secreto que se descubre casi al final del libro. Pero junto con la trama principal hay otra serie de desesperanzas y de egoísmos, aunque no es suficiente para tapar un pequeño velo de ilusión y optimismo, tal como comenté antes.
¿Qué consejo te gustaría darle como escritor a tu yo de hace unos años?
Pues es simple. Seguir escribiendo y leyendo mucho. Aprender de los grandes maestros de la literatura. Si verdaderamente la literatura es tu pasión hay que hacer todo lo posible para no abandonarlo nunca. El gran ejemplo es la notable obra de Tolstoi, producida en intervalos de tiempo de su actividad militar y hasta en el frente. Persiguiendo a los cosacos, jugando y bebiendo, jamás dejó de escribir. Un trabajo y una voluntad imponente.
¿Cuál ha sido tu experiencia con la Editorial Círculo Rojo?
Me parece una buena editorial, bastante profesional. Le falta el punto final de la promoción de sus autores, pero estoy seguro de que todo llegará como llegará el crecimiento de la editorial. Las cosas bien hechas siempre prosperan.
¿Qué autores te han inspirado más a la hora de escribir?
El lector va a encontrar en el libro un reflejo de las amplias zonas de oscuridad del ser humano como ya nos diera a conocer Dostoievski o Kafka. La dureza de la maldad de un ególatra amparado por su posición social. El desapego por la vida de una gente condenada al alcohol y las drogas, y los toques de novela policiaca, al estilo de ese gran escritor como George Simenon. Cada personaje tiene un mundo interior, pasado y presente, que pretende ser desvelado con el fogonazo de la mirada de Muñoz Molina, salvando las distancias con tan grandes maestros de la literatura.
¿Dónde se pueden conseguir tus libros?
Tanto “Una Lluvia fina y mentirosa” como “De la literatura y las pequeñas cosas” se pueden conseguir en las plataformas digitales Amazon, El Corte Inglés, FNAC, Casa del Libro o en la propia editorial
También se podrá adquirir directamente a través de mi página web www.manjonguinea.com que estará lista para finales de mayo de 2022
Para terminar, ¿nos recomiendas alguna lectura?
Pues actualmente me estoy terminando de leer un libro de Francisco José Rodríguez Gaspar titulado “Otto Skorzeny, el nazi más peligroso en la España de Franco”, y otro de la periodista y escritora italiana Oriana Fallaci, “Un sombrero lleno de cerezas”.
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