Conocemos la obra “Esperando un corazón”, del escritor Jorge Targui
Empecemos por lo principal, ¿quién es Jorge Targui?
Nací en un pequeño pueblo con grandes sueños sin cumplir. De niño, me sumergía en las historias de dioses y héroes, creyendo en cada leyenda como si fuera real.
Viví la mayor parte de mi vida en la vibrante Barcelona, pero el destino tenía otros planes y me devolvió a la tierra de mis raíces en Lérida, un lugar mágico donde los cuentos cobran vida si sabes observar. Mi pasión por la mitología griega se intensificó aún más en este lugar.
En mi tiempo libre, disfruté enseñando a los jóvenes en ENTI (Escuela de Nuevas Tecnologías de la Información) en Barcelona, donde aprendí más de mis alumnos que ellos de mí, y donde encontré mi pasión por la creación de aventuras digitales.
Sin embargo, la vida es llena de sorpresas y siempre nos lleva por caminos inesperados. En algún momento trabajé en una importante compañía de software de gestión y contabilidad que ahora ha desaparecido, contando los minutos para poder regresar a casa y crear aventuras para mi hijo pequeño. Pero ahora, con él ya mayor, se ha convertido en mi compañero de aventuras, narrándome sus propias historias llenas de imaginación.
¿A qué edad sientes la necesidad de empezar a escribir?
Al igual que todos los niños y niñas de mi época, empecé a escribir a una edad que ya no recuerdo. Y lo odiaba, esos dictados horribles, la gramática, el léxico, la ortografía. Cuando me querían explicar los conceptos de la narrativa me inculcaban palabrejas raras y extrañísimas que era incapaz de memorizar. Nunca entendí qué era un soneto y que no se podía escribir lo que me salía de un sitio en concreto. Tenía que escribir según unas pautas.
Después de algunas redacciones bastante interesantes en la loca edad de la adolescencia, me focalicé en la electrónica y la informática abandonando la literatura. Han tenido que pasar treinta años para reencontrarme con la narrativa, hacer la paz con el soneto y asumir que el hiato y el diptongo no son seres diabólicos que amargaron mi niñez. Aprendí a amar las preposiciones, aunque todavía no las sepa en orden. Y todo ello no ha sido hace mucho, mi mente se cansó de esquivar la escritura y decidí empezar a una edad mucho más madura, encontrándome en ese momento en un estado embrionario del proceso narrativo.
Hablemos de tu obra más reciente. ¿Cómo nace la idea de escribirla?
Es un acto volitivo, un impulso que surge desde lo más profundo de nosotros mismos. ¿Qué sucede cuando esa idea latente no se deja ver, cuando se esconde? A veces, es necesario que la vida nos presente una encrucijada, una elección a tomar, para que finalmente esa idea se revele.
Fue así como me encontré ante el camino del escritor, un camino que había elegido erróneamente una y otra vez, hasta que la vida me obligó a elegir el único camino posible. Y aunque ese sendero parecía ser el más doloroso y traumático, no tardé en descubrir que era la lección que necesitaba aprender.
Así nació ‘Esperando un Corazón’, tras un aviso de salud, una obra en la que plasmo todo aquello que había estado latente en mi interior. Una oportunidad para dejar fluir la creatividad y explorar el mundo interior, en busca de respuestas a las preguntas más profundas. Un camino que, aunque difícil, resultó ser una bendición. En fin, una invitación a los lectores a sumergirse en sus propios mundos interiores, para descubrir las ideas latentes que aguardan ser reveladas.
¿Qué pretendes conseguir en el lector con su lectura?
En la obra ‘Esperando un Corazón’, me adentro en un viaje hacia mi interior, desgranando los misterios y sombras que habitan en mi ser. Una madre narcisista, un padre alcohólico, un infarto que me sumió en una lucha por mi vida en la UCI, y un coma que me permitió emprender un camino hacia lo desconocido.
En ese multiverso disociado, encontré la oportunidad de examinar mis relaciones personales, mi vida y mi contexto, y conectar con mi ser. La escritura se convirtió en un medio para liberarme de la prisión emocional que yo mismo había creado, y transmitir un mensaje valioso y significativo, no solo a mí, sino también a quienes tienen la oportunidad de leer mis palabras.
Mi cerebro se convirtió en un artífice, creando un universo en el que el sufrimiento se convirtió en un relato. Una serie de historias distópicas, auto-inclusivas y paranoicas que me permitieron analizar mi vida anterior y reflexionar sobre ella. Un espejo para el lector, una invitación a adentrarse en la intimidad más profunda y reflexionar sobre sus propias experiencias.
Este libro es un canto a la humanidad, un abrazo consolador para aquellos que luchan en la soledad. Un llamado a encontrar la paz y la comprensión en la compañía de los demás y en el camino hacia uno mismo.
¿Eres un escritor ambicioso de los que quiere llegar lejos, o te conformas con escribir lo que quieres y publicar a tu ritmo, con diferencia del éxito que puedas conseguir?
El éxito es un premio, pero no mi motivación. La satisfacción de plasmar en el papel mis pensamientos y sentimientos es mi verdadero tesoro. Y si el destino lo permite, mis palabras serán compartidas con aquellos que deseen leerlas. Pero si no es así, yo seguiré escribiendo, sin prisa, disfrutando del camino.
¿Cómo ha sido tu experiencia sobre el proceso de publicación?
Fue una montaña rusa de emociones convertir el texto en un libro tangible. De la alegría de tener una editorial interesada en mi trabajo hasta la angustia de las correcciones ortográficas. ¿Quién sabía que los acentos eran tan importantes? Pero también ha sido una oportunidad de aprendizaje, descubriendo cómo la paciencia y la creatividad son clave en la maquetación y el diseño.
Y la portada, esa es la joya de la corona, el alma de un libro en su forma más hermosa. La impresión, sin embargo, es el momento en que los nervios se agitan, conteniendo la respiración en espera de tener el primer ejemplar en las manos. ¡Qué maravilla ha sido todo el proceso!
¿Algo que puedas aconsejarles a los que están pensando en publicar?
La escritura es un viaje, una liberación que une el espíritu y la mente. Con cada trazo de la pluma en el papel, se despiertan fuerzas poderosas que transforman tanto al escritor como a su entorno.
Comenzar a escribir es un regalo que te das a ti mismo, un camino hacia el auto-descubrimiento y la comunicación con el alma. Al compartir tus pensamientos y emociones, aunque sea de forma anónima, estás dejando un legado que puede ayudar y tocar el corazón de alguien más. ¡Anímate a embarcarte en esta maravillosa aventura y publica!
¿Cuál ha sido tu experiencia publicando con la Editorial Círculo Rojo?
No tenía en mente la publicación, simplemente quería hacer un ejercicio de introspección y sanación. Pero , ¡oh sorpresa!, las redes sociales, ese oasis de gatos y memes, me mostraron un camino inesperado hacia la publicación. Al principio, no quería apresurarme y cometer errores, pero, después de buscar y encontrar la editorial perfecta, todo comenzó a fluir de manera armoniosa. Antes de darme cuenta, ya tenía un libro impreso en mi casa, ¡fue una verdadera aventura! Así que, deja las prisas de lado y disfruta del proceso de publicación, ¡te aseguro que será una experiencia maravillosa!
¿Qué autores te han inspirado más a la hora de escribir?
La lectura es un romance apasionado, y descubrir nuevos autores es como encontrar tesoros. Para un escritor principiante, sumergirse en la literatura es como un viaje de exploración y crecimiento. No hay una sola palabra que pueda ser pronunciada sobre un autor sin mencionar su obra.
Algunos de los autores más inspiradores son Eduardo Mendoza, con su extraterrestre en “Sin noticias de Gurb”, que es un ejemplo de imaginación y originalidad. Recientemente, he descubierto a Theodor Kallifatides y su inquebrantable aferro a la vida en “Otra vida por vivir”, que es un ejemplo de coraje y fortaleza.
Irene Vallejo y su libro “El infinito en un junco”, nos llevan en un viaje inolvidable a través de 30 siglos de historia del libro. Al leer esta obra, uno comprende el valioso legado de los libros y el poder que tienen para transformar vidas y transmitir conocimiento de generación en generación. Para aquellos que sueñan con publicar un libro, esta obra es una guía indispensable, que les muestra la importancia de valorar cada palabra y cada historia, porque incluso los libros más pequeños o aparentemente insignificantes tienen un valor incalculable.
Los dos volúmenes de “¿Seres humanos o marionetas?” de Joan Antoni Melé son obras que cautivan y te hacen reflexionar profundamente con cada párrafo leído. El autor plantea una pregunta fundamental y te invita a cuestionarte sobre tu propia vida y la de los demás. Desde aquí, se envía una llamada al autor para que escriba el tercer volumen.
Claudia Baez y su libro “Semillas de luz para ti” son una dádiva para los buscadores de conocimiento y reflexión. Cada página es una semilla que, al ser cultivada, florece con una luz cálida y sabia, iluminando los corazones de todos aquellos que se dejan alcanzar por ella. Claudia es como un rayo de sol en medio de la oscuridad, una estrella que guía hacia la verdad y es gracias a ella que empecé con la escritura.
¿Dónde se pueden conseguir tus libros?
Estoy extasiado de compartir con ustedes mi libro y que lo disfruten tanto como yo disfruté escribiéndolo. Pueden adquirirlo fácilmente en cualquier librería o a través de internet en plataformas como Amazon, Fnac, Casa del libro, El Corte Inglés y libros.cc. ¡No pierdas la oportunidad de sumergirte en este increíble viaje a través del tiempo!
https://libros.cc/Esperando-un-corazon.htm
https://www.casadellibro.com/libro-esperando-un-corazon/9788411558617/13499593
https://www.fnac.es/a9921907/Jorge-Targui-Esperando-un-corazon#omnsearchpos=1
https://www.fnac.es/a9921907/Jorge-Targui-Esperando-un-corazon#omnsearchpos=1
Para terminar, ¿nos recomiendas alguna lectura?
He sido cautivado por las páginas de la historia desde una edad temprana. Mi pasión por el pasado ha sido un faro que me ha guiado en la oscuridad de la ignorancia, y en esa búsqueda, he encontrado a Timandra, Theodor Kallifatides, como una guía. Su narrativa sobre la antigua Grecia me da una perspectiva más auténtica, emocionante y conectada con aquellos tiempos. Es una experiencia que me ha llevado más allá de los libros y me ha permitido explorar el alma de la humanidad.
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